El refugio Diego Mella se esconde en el corazón de los Picos de Europa entre gigantes de caliza que vigilan su sueño estrellado. Merece la pena pasar la noche en Collado Jermoso por ver la puesta de sol que tiñe de naranja el cielo partido por el contorno de los picos. Hay varias formas de llegar al refugio nosotros salimos del puerto de Pandetrave y caminamos por la horcada de Valcabao, subimos el canal de Pedabejo y fuimos atravesando una a una Las colladinas, en total 11.9 km de distancia. Once kilómetros de paisajes atravesados por milenios de historia geográfica que han dejado su impronta, once kilómetros observados por picos afilados por el viento, once kilómetros donde vimos caballos pastando en las alturas, cardos violetas que parecen querer destacar con sus colores sobre el azul del cielo, el verde de las praderas y el blanco grisáceo de la caliza, rebecos desafiando el equilibrio y la altura de las montañas. Once kilómetros para pensar en la suerte de estar allí, en la importancia de que existan estos espacios y en la paradoja de que algo tan grande y tan libre tenga que ser protegido.
A mi regreso a este mundo virtual no puedo encontrarme con algo que me toque más el alma que estas fotos de mi Asturias; las fotos son maravillosas ¡gracias por todo!
Un abrazo.
Muchas gracias Isa 🙂 Me alegro que te gusten, ese paisaje es imposible sacarlo mal
Preciosas fotos. Me han dejado por unos momentos obnubilada entre tanta belleza en todo su esplendor. Las fotos recogen momentos mágicos y parte de esa inmensidad libre que tiene que ser protegida.
Un saludo.
Gracias Gemma
Unas fotos preciosas, mi preferida la que muestra las montañas en tres tonos de azules con un cielo anaranjado de fondo, muy bonita.
Muchas gracias por la visita
¡Qué maravilla de sitio y de fotos! Pero si no estuviera protegido posiblemente ya se lo habrían cargado o, por lo menos, estropeado un poco
Es necesario que este protegido pero no debería tener que ser así. Muchas gracias Eva